Misterio en las Aguas Infinitas
I
En la danza perpetua del horizonte,
su perfil ondulante revela el misterio,
una faz preciosa siempre cambiante, fluidez de ensueño.
La atracción del mar se arraiga en la mágica influencia,
ese instante en que lo vemos, oímos, sentimos.
Serenidad en la mirada al piélago,
esencia de una transformación eternamente constante.
La masa, donde el horizonte se pierde en la sinfonía del fin,
oculta un universo completo de vida y estados.
Su misterio atrapa como un enigma sin respuesta,
y el azul que abraza proporciona la paz que embriaga.
Rítmico y acompasado vaivén de las olas,
agitado por tormentas que fustigan navíos y costas.
Música que tranquiliza, aquiete el corazón,
y despierte pensamientos en las profundidades del océano.
II
En las costas de Jonia y Grecia,
donde brotó la filosofía occidental,
impregnada con la sabiduría del conocimiento,
dominada por la danza de míticas sirenas.
El interminable ir y venir de las olas
habla el lenguaje de los filósofos,
un permanente fluir, un incesante eterno retorno.
Enfilar la proa hacia el ser, bucear en abisales profundidades,
depositar en la playa el ansiado autoconocimiento.
Mientras el eco del pensamiento teje sutil hamaca,
con la espuma del mar como hilo conductor.
Un cadencioso espectáculo de movimiento y armonía,
donde los infinitos matices del mar despiertan.
Colores que destilan poesía, dimensiones que desafían,
sonidos que danzan en lo incesante.
Haz este poema un susurro en el viento de la reflexión,
una oda a la vastedad que yace en las aguas insondables.